Página 345 - Informe Anual 2011. Defensor del Menor de Andalucía

6. Las quejas
343
Ante esta realidad, por parte de esta Institución, tratando de aplicar la ecuanimidad
que nos es exigible, y aún a veces teniendo el convencimiento moral de que aunque
no con la extrema gravedad que en algunos casos se nos exponen las situaciones, pero
tampoco quitándosela toda y negando rotundamente la existencia del acoso denunciado,
a la vista de lo alegado por los interesados y de lo informado por la Administración, no
nos queda más remedio que proceder a suspender nuestras actuaciones.
Y esto debe ser así porque no podemos dejar de tener presente que nos
enfrentamos a cuestiones con un marcado componente subjetivo, de manera que para
pronunciarnos con rigurosidad deberíamos disponer de todos los elementos de juicio,
esto es, habríamos de contar con la versión de cada uno de los actores intervinientes,
director, alumno, profesorado, compañeros, etc. Es más, estamos convencidos de
que aun con tales relatos seguiría siendo difícil alcanzar un pronunciamiento certero
en tanto que en última instancia habría que sopesar si alguna actuación pudo estar
condicionada por alguna percepción personal no completamente objetiva.
No obstante, y como dijimos al principio de nuestra exposición, esperamos que la
tendencia mostrada a la disminución de este tipo de conflicto, no solo se consolide,
sino que, como mucho, aparezca como anecdótica.
6.2.4. Becas y ayudas al estudio.
En primer lugar, debemos referirnos a la Actuación de Oficio referenciada con el
número de queja 10/4862, iniciada tras tener conocimiento esta Defensoría por los
medios de comunicación escrita de la denuncia formulada por colectivo de Asociaciones
de Madres y Padres de Alumnos de Andalucía, ante la posible vulneración del Programa
de Gratuidad de Libros de Texto, al estar, al parecer, obligándose a las familias a tener
que adquirir los cuadernillos adicionales de actividades y ampliación de contenidos,
que se editan como complemento a los propios libros de texto.
Aunque en el Informe anual del año pasado se analizó la tramitación llevada
a cabo en este expediente, dicho análisis quedó inconcluso, por lo que resulta
necesario dar cuenta de la resolución final del mismo.
Previamente recordar que el problema radicaba, como decíamos, en que los
lotes de libros financiados por la Administración educativa para Educación Primaria y
Secundaria no incorporaban, en su mayoría, cuadernillos de actividades, y por ello la
acusación que realizaban los interesados a las editoriales era de “estar aniquilando
el espíritu de la gratuidad de los libros de texto”. También se alegaba que las
editoriales preferían vender estos cuadernillos como un suplemento aparte a las
familias, para así obtener los beneficios que había perdido el sector en los últimos