6. Las quejas
465
Por último, como técnica promocional e informativa también resulta interesante
la concertación de entrevistas personales o en grupo. Estas entrevistas son muy
efectivas en aquellos supuestos en que se pretende sensibilizar a los familiares
extensos del menor, al tratarse en ellas cuestiones personales y afectivas idóneas
para su comunicación verbal en un entorno más íntimo y reducido.
Pues bien, nos consta que en las diferentes Delegaciones Provinciales de la
Consejería para la Igualdad y Bienestar Social se vienen realizando estas tareas de
promoción y que además existe una red de asociaciones que vienen colaborando
con la Administración en dicha función. Por tal motivo, lejos del desánimo estimamos
que la Administración no debe contentarse con los resultados obtenidos y debe
redoblar los esfuerzos para reducir el número de menores que aún permanece en
centros por período muy prolongado.
En materia de protección de menores sobran las dificultades desde el mismo
momento en que la Administración ha de incidir en la vida privada de las familias
inmiscuyéndose en derechos y obligaciones derivados de la relación paterno
filial, todo ello en cumplimiento de la misión de protección de la persona menor,
defendiendo sus derechos e intereses. Y en esta clave, aún contando con estas
dificultades, no falta la gratificación y ejemplo que día a día proporcionan muchas
personas con el ofrecimiento altruista que hacen para atender, cuidar y educar a la
persona menor, tutelada por la Administración.
En unos casos se trata de los propios familiares de la persona menor que aceptan
asumir las cargas que supone el cuidado de su familiar, niño o niña que precisa de
ello, con un compromiso de duración a veces corta o en otros casos más prolongada,
pero con la nota común de solidaridad, compromiso y dedicación a dicha tarea.
En otras ocasiones se trata de personas que trasladan a la Administración su
ofrecimiento para participar en programas de acogimiento familiar, con conocimiento
pleno del compromiso que adquieren y que han superado la evaluación de la
Administración para valorar su idoneidad, descartando circunstancias o motivaciones
no compatibles con la misión del acogimiento familiar, y de quienes también se ha
resaltar los valores humanos de solidaridad y servicios hacia los demás.
Y día a día, a pesar de encontrarnos en una coyuntura histórica de crisis de valores,
en donde prima la satisfacción individual sobre el compromiso social, no deja de ser
gratificante la existencia de listas de espera de familias dispuestas al acogimiento de
menores tutelados por la Administración, en sus diferentes modalidades y con sus
diferentes peculiaridades y connotaciones.
1...,457,458,459,460,461,462,463,464,465,466 468,469,470,471,472,473,474,475,476,477,...714