Página 247 - Informe Anual 2011. Defensor del Menor de Andalucía

6. Las quejas
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6. LAS QUEJAS.
En este apartado de la Memoria anual describimos las distintas actuaciones
desarrolladas en los expedientes de quejas iniciados de oficio o a instancias de
ciudadanos o ciudadanas que demandaron el auxilio del Defensor del Menor de
Andalucía o del Defensor del Pueblo Andaluz, en asuntos relacionados con los
derechos e intereses de las personas menores de edad.
Así durante el año 2011 se han tramitado un total de 1.376 quejas, de las cuales
78 fueron promovidas de oficio por la Defensoría. El mayor porcentaje de estas
reclamaciones está relacionado con el ámbito educativo (799) seguidas de todas
aquellas que se refieren principalmente a protección de menores (320). El detalle
cuantitativo del conjunto de todas las quejas debidamente clasificadas por materias
se contiene en el Anexo estadístico que consta al final de este documento.
Para la dación de cuentas de las principales quejas abordadas en la diferente
temática que afecta a la infancia y adolescencia hemos seguido una estructura
similar a la empleada en ejercicios anteriores. De este modo, comenzaremos por
hacer alusión a la salud, para continuar con la educación, el juego, deporte, cultura y
ocio, la familia, el sistema de protección de menores inmigrantes y con necesidades
especiales, responsabilidad penal, justicia, y concluimos con una referencia a las
quejas sobre los medios de información y comunicación.
6.1. La salud.
6.1.1. Políticas de salud relacionadas con cuestiones medioambientales.
En lo que atañe a la salud pública general de la población y refiriéndonos a
cuestiones medioambientales, debemos destacar, tal como en años precedentes, las
quejas relacionadas con las radiaciones electromagnéticas generadas por estaciones
base de telefonía móvil -en las que apreciamos un ligero descenso- y las relativas a
contaminación acústica.
Por lo que se refiere a molestias por ruidos, sigue siendo frecuente la llegada de
quejas en las que sus promotores nos trasladan los problemas que padecen sus hijos
e hijas como consecuencia de los excesivos niveles de ruido que se ven obligados a
soportar. En este sentido, las dificultades para conciliar el sueño, para concentrarse
en el estudio, para realizar tareas, para tener un rendimiento escolar adecuado o