Defensor del Menor de Andalucía. Informe Anual 2011
528
la correspondiente denuncia ante el Juzgado de Familia y la denuncia fue archivada,
por tratarse de un menor de menos de 14 años. Informó al padre de los hechos que
estaban ocurriendo, pero no resolvía el problema.
Ante dicho supuesto, asesoramos a nuestra interlocutora que acudiera a un
profesional de la salud, bien al pediatra para que éste valorara la situación y, en caso
de estimarlo oportuno, derivara a la menor al Equipo de Salud Mental Infantil, o bien, al
Equipo de Mediación Familiar. En ambos casos, los profesionales activarían el protocolo
de posible situación maltrato si procedía, a fin de intervenir con la familia.
Como hemos señalado, otros asuntos son los derivados de separaciones por violencia
doméstica
,
con orden de alejamiento por malos tratos, en la que los menores deben
continuar con el régimen de visitas a favor del progenitor no custodio y supuesto agresor.
A título de ejemplo, en la
Consulta Nº 11/954
la interesada, víctima de malos
tratos al igual que sus hijos de 10 y 7 años, se encontraba en proceso de separación a
causa de un intento de homicidio. Según la interesada el marido la roció con gasolina
y quiso prender fuego a la casa con los niños dentro. El juez había dictado medidas
cautelares en las que otorgaba al padre un régimen de visitas. Los niños tenían
miedo, ataques de ansiedad y somatizaciones cada vez que estaban con el padre.
Había solicitado modificación de las medidas cautelares y el juzgado aún no se había
pronunciado. Ante este supuesto, se le indicó a la interesada que dirigiera escrito a la
Institución para estudiar la demora del proceso judicial al que hacía referencia.
En el mismo sentido que la anterior, en la
Consulta Nº 11/400
la interesada
exponía que su ex marido tenía una orden de alejamiento respecto de ella desde hacía
3 años. Debido a la situación traumática que había vivido su hija durante la convivencia
con el padre, se encontraba recibiendo tratamiento psicológico y llevaba 3 años sin tener
contacto con él. En estas circunstancias, la Jueza decide reanudar un régimen de visitas
a favor del padre pero la menor no lo quiere cumplir. Sufre crisis de ansiedad y la policía
tiene que intervenir para que la niña se marche con el padre en contra de su voluntad.
Y es en este sentido que la interesada solicita al Defensor del Menor de Andalucía que
medie para el que, al menos, el régimen de visitas se realice de forma gradual.
Los conflictos familiares, tras la separación de los progenitores, afectan también
a la familia extensa, y se han recibido llamadas de abuelos, abuelas, tíos, solicitando
que se les asesore sobre cómo pueden proceder para continuar relacionándose con
sus nietos o nietas, sobrinos.
Un ejemplo lo tendríamos en la
Consulta Nº 11/731
donde la interesada, tía
paterna de dos menores, se quejaba de haber perdido el contacto con sus sobrinos,
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